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El proceso de transición.
La salida de la empresa de inserción y la incorporación al mercado de
trabajo ordinario (MTO), sea en situación de empleo o de búsqueda de empleo,
es la meta del contrato de inserción y hacia ella se orienta el itinerario
recorrido en la empresa de inserción, tanto por lo que establece la
legislación como porque es también seña de identidad de las empresas de
inserción, que tienen vocación de pasarela al MTO y no de convertirse en
nichos de contratación indefinida. Son dos caras de una misma moneda, y ambas
suponen un factor de estrés para la persona con contrato de inserción: el
acceso al MTO, por las dificultades que representa y por las condiciones de
la oferta; la salida de la empresa de inserción porque va contra la lógica
del mercado de trabajo (prescindir de alguien que trabaja bien) y porque
representa también abandonar una seguridad y estabilidad que son las que han
permitido progresar a la persona en inserción.
Qué acciones exige la ley en materia de
acompañamiento durante la transición.
"Como nuevos modelos de actuación en esta materia se encuentran las
empresas de inserción, que constituyen una tipología especial dentro de las
empresas de carácter social y confirman que el empleo es y será para los más
desfavorecidos y excluidos uno de los principales vectores de inserción
social y una forma de participación en la actividad de la sociedad.”
Las metodologías que se desarrollan durante un itinerario de inserción,
dentro del cual se lleva a cabo la actividad laboral en la empresa de
inserción, tienen como objetivo potenciar las capacidades de las personas a
través de los conocimientos técnicos, habituación sociolaboral y
determinación de prioridades adecuadas a sus posibilidades y a las del
mercado laboral.
Se trata de regular las empresas de inserción con el objetivo de servir
como un instrumento más a la inserción de los sectores excluidos de la
sociedad, articulándose en este caso tal inserción a través de una prestación
laboral en la empresa de inserción que permita la transición de la persona en
situación de exclusión social al empleo ordinario.
Se definen los itinerarios de inserción sociolaboral que siguen quienes
tienen contrato de inserción, y que incluyen el tránsito al MTO como último
paso para facilitar su integración en la sociedad.
Las medidas de intervención y acompañamiento consistirán en el conjunto de
servicios, prestaciones, acciones de orientación, tutoría y procesos personalizados y
asistidos de trabajo remunerado, formación en el puesto de trabajo y
habituación laboral y social; todos ellos encaminados a satisfacer o resolver
problemáticas específicas derivadas de la situación de exclusión que
dificultan a la persona acceder directamente al MTO. Por eso, las empresas de
inserción deben tener servicios de intervención o acompañamiento para la
inserción sociolaboral que faciliten su posterior incorporación al mercado de
trabajo ordinario. |
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Actualmente,
cada comunidad autónoma define específicamente algunas de estas medidas de
intervención, incluidas las relativas a quién se encarga de esta fase de
transición y cuánto tiempo tiene que durar el seguimiento a la finalización
del contrato (por ejemplo, en Valencia, no se considera incumplida la
obligación de mantenimiento del itinerario mínimo de seis meses cuando la
baja en la empresa de inserción se produzca por la contratación del personal
en empresa ordinaria, mediante la suscripción de un contrato de duración
mínima de tres meses).
La acción de acompañamiento en torno al tránsito al
MTO
La realización de las tareas profesionales que implican la acción de
acompañar conllevan un conjunto de procesos que recaen especialmente en el
personal técnico de acompañamiento (PTA) y de producción (PTP). Identificamos
aquí, al menos, dos niveles:
- la tarea propia del personal
técnico de acompañamiento y de producción respecto a esta fase,
- la sensibilización del mercado
ordinario y la captación de ofertas en el territorio.
La manera de organizar estas tareas es diferente según las realidades de
cada empresa de inserción, la composición de los equipos, las acciones que
asume la entidad promotora o bien entidades con las que la promotora trabaja
en red; si bien raramente las administraciones asumen ninguna función en este
momento.
Es conveniente delimitar bien este trabajo, pues hay tareas que son
sustancialmente distintas a la labor cotidiana que se realiza en las empresas
de inserción y que suponen relacionarse con empresas del sector y el
territorio para la captación de ofertas, la información y la sensibilización,
más allá de la relación con el personal en proceso de inserción.
Quizás por las condiciones de los propios equipos profesionales, muchas de
estas tareas recaen sobre una única persona que se encarga tanto de la
planificación como del seguimiento. En los encuentros mencionados, se
constató que esta no es la situación deseable.
Fruto de las reflexiones indicadas, se han acotado cuatro procesos
diferenciados que, si bien pueden dar lugar a algún solapamiento en el
tiempo, en la medida en que se trata de procesos más que de fases propiamente
dichas, tienen un objetivo y un propósito bien diferenciados.
- Orientación laboral
- Intermediación laboral
- Prospección de empresas
- Mantenimiento del empleo /
seguimiento post colocación
En los conceptos, detallamos cada uno de estos procesos, así como las
tareas que entendemos que corresponden a cada uno. |
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